Datos personales

Mi foto
Proyecto de Difusión Cultural y Creación Artística de Horror y Fantasía

jueves, 23 de septiembre de 2010

Lic. Pedro Alejandro González

Porque ir al cine a espantarse parte III

En el articulo pasado dimos cuenta de cómo a mediados de los 70’s el cine de horror tuvo un vuelco, a nadie lo espantan monstruos clásicos como Drácula o la Momia, las producciones de Universal Pictures cayeron en la parodia y en el olvido, actores notables como Bela Lugosi murieron en la pobreza y el abandono; la productora inglesa Hammer que durante los 50’s y 70’s reavivo la llama que perdió Universal con sus monstruos con versiones más escandalosas de Frankenstein y Drácula empezaba a caer en clichés y excesos referentes al tono sexual de sus películas, quitándole mucha calidad a ellas, llevando a la productora al mismo destino que la Universal por ahí de mediados de los setenta . Pero el cine de horror ya maduro surge en 1968 con la noche de los muertos vivientes de George A. Romero y es que Romero no solo crea al Zombie moderno tal y como lo conocemos alejado del estereotipo vudú, si no que su cinta, sienta las bases para hacer cine de horror en las próximas décadas, como por ejemplo el crear una cinta con calidad a base de un ínfimo presupuesto en un mínimo de tiempo, personajes mas humanos y creíbles, ya que los personajes de Romero están asentados en escenarios rurales combinando la trama con un blanco y negro que en lugar de entorpecer la película le recrea cierto aire documental de verosimilitud. Ya lo comenta el especialista Jesús Palacios en su libro “La plaga de zombies y otros relatos de muertos vivientes”, Romero crea una mitología tan atrayente para copiar y manufacturar en un sin fin de historias, tanto como la de Tolkien, es una mitología tan sencilla pero implica muchas cosas, uno grupo de tipos comunes son arrebatados de su cotidianidad para refugiarse y sobrevivir de un gran peligro exterior y muchas veces ellos mismos contribuirán con su autodestrucción ; como nos dice Palacios, Romero es el inventor del “Survivor Horror”, una temática tan usada desde entonces en el cine de horror, que se centra mas en las acciones de supervivencia de los pobres diablos que les tocarán sortear infinidad de peligros, desde zombies en el caso de Romero o vampiros, a el amanecer del genial Robert Rodríguez, o también mutantes locos como en el “Hombre Omega” de Boris Sagal, basada en la ya clásica novela apocalíptica “Soy Leyenda” de Richard Matheson ,de hecho esta novela es el arco principal para la inspiración de Romero para crear la noche de los muertos vivientes; los elementos del “Survivor horror” que usa Romero son tan socorridos por los cineastas que no solo el cine de horror los usa si no también otros géneros como en la cinta de acción y suspenso de John Carpenter masacre en la comisaría 13 en donde los últimos miembros de un escuálido escuadrón de policía, se refugian en la maltrecha comisaría 13 del fiero ataque de unos Punks enloquecidos que quieren liberar a uno de sus compañeros, el desenlace es inesperado y como en “La noche de los muertos vivientes” los que se refugian del peligro externo causan su propia desgracia demostrando así lo cruel y obscura que es la naturaleza humana bajo presión, y los actos viles que puede cometer un ser humano normal por el acto de sobrevivir .

Los elementos ya comentados, fundados por la cinta de Romero serán retomados por varios cineastas, en 1979; Tobe Hooper nos entrega una película que al igual que la de Romero esta hecha con un ínfimo presupuesto y con una atmósfera de cine documental me refiero a “La Masacre de Texas” que nos lega a el monstruo mas impactante de la modernidad, por su deformidad no física, si no moral y espiritual, el asesino en serie, el impacto de este ser es porque ya no es un no muerto o ser sobrenatural es un simple humano, tan parecido a nosotros pero a la vez tan alejado, por sus abominables actos, Hooper junto con otros directores debutantes como Wes Craven (Papa de Freddy Kruger) con sus “Las colina tienen ojos” y “La última casa de la izquierda” todas de los 70’s, nos entregan un retrato de esa sociedad norteamericana tan alejada del glamour y status quo, esos grupos marginales en parajes del “Bayou” pantanoso o de provincias desérticas, esa América gótica productora de los mas viles seres capaces de matar e inclusive comerse a su prójimo americano, que no son mas que el reflejo de casos reales como Ted Bundy o Ed Gein, este tipo de cine nos lleva a una reflexión muy profunda en donde se cuestiona si realmente la marginalidad y pobreza de estos escenarios llevan al nacimiento de estos individuos o simplemente son el producto de la fracturada sociedad americana, con su guerra de Vietnam, su consumismo desbordado y su corrupción moral, una América que lleva el record de asesinos seriales en el mundo, una América en donde varios chicos han organizado tiroteos en contra de sus compañeros de escuela y todo porque en ese país es tan sencillo comprar armas como si de zapatos se tratase, por eso durante las siguientes décadas el asesino serial será el rey indiscutible del cine de horror, para que durante los 90’s goce de un prestigio tan alto como el de un superhéroe a y si no me creen acérquense a ver cintas como “El silencio de los inocentes” o “Psicópata americano”; en el caso de “El silencio de los inocentes” el Dr. Aníbal Lecter ya no es un pueblerino mugroso con mascara de cuero, es culto refinado, muy hábil e incluso es un tipo que puede ayudar al FBI, claro tiene un pequeñito problema, es caníbal; en el caso de “Psicópata americano” se retratan las andanzas de un hijo del “American Dream” un ejecutivo yuppi de “Wall-Street” que lo tiene todo, mujeres, dinero, auto, un lujoso departamento, pero algo hace falta, algo que llene el hueco existencial, así que nuestro amigo se dedica a asesinar prostitutas y vagabundos por las noches de las maneras mas sádicas posibles, una cruda metáfora de las verdades del exceso de poder, cosa que parece ser de mucho agrado a la sociedad de nuestro vecino país (cuando hablamos de asesinato y exceso de poder no se les viene a la mente el nombre del ex-presidente George W. Bush); otro fenómeno que acompaña al cine principalmente de asesinos seriales, es la entrada de uno de los públicos con mayor demanda del cine de horror, los jóvenes; durante los 80’s, cintas como Halloween o Viernes 13 que recrean las andazas de grupos de adolescentes envueltos en fiestas donde hay sexo y alcohol al por mayor, tienen que defenderse del ataque del asesino serial en turno, muchas veces estos asesinos son muy interesantes o cautivadores como Michel Myers de Halloween o Freddy de “Pesadilla en la calle Elm”, claro, pero no podemos dejar de sufrir por la torpeza y aveces malas actuaciones de sus coprotagonistas “teenegers” no es hasta 1996 con la película “Scream” de Wes Craven que se hace una critica y revisión muy inteligente y bastante divertida, claro a un seguimos teniendo el ciclo del cual Norma Lazo nos habla y que comente en los artículos anteriores, el cine de horror tiene un inicio, después un auge, después un decaimiento que termina con la parodia, a continuación viene la deconstrucción y crítica que dan nuevos aires al género, en el caso del cine de adolescentes y asesinos seriales Scream fue la que generó la critica y deconstrucción tildando y cuestionando las reglas o clichés que hicieron famoso al género durante los ochentas.

Hoy en día los asesinos en serie siguen gozando de popularidad bajo una nueva modalidad la de el juego de tortura, películas como las de la saga “Saw”, “Hostal” o la española “Tesis” muestran una realidad voyeurista en donde el asesino nos deja ser participes como espectadores de sus fechorías en donde las muertes son cada vez mas elaboradas y dejan a la victima, antes de morir, en un sufrimiento agónico por el cual se regodea el asesino, pero porque hemos llegado a este extremó de muy mal gusto para muchos y algo enfermizo para otros, algunos especialistas como el director John Carpenter en el documental “Monster Land” afirma que después del 11 de septiembre, los medios transmitieron sin medias tintas una serie de fotos de soldados americanos torturando prisioneros de la guerra de Irak, mostrándonos en la cara de los torturadores jubilo y alegría, mostrando una cara a la humanidad de la cual muchos niegan que pueda existir, estos hechos son claro reflejó en la pantalla de nuestros más sádicos y bajos instintos como especie, puede ser o tal vez no, eso se los dejo de tarea a ustedes. Los vampiros y hombres lobo criaturas de envergadura mítica en antaño hoy en día están muertas en sentido literal en el cine de horror, bajo el ego de jovencitas que creen en Edward Cullen, su fallido y ficticio “Príncipe Azul”; durante los 80’s estas criaturas tuvieron un digno y prometedor regreso sobre todo los hombres lobo con películas como “Aullido” de Joe Dante (papá de gizmo y los gremnlins) y “Hombre lobo americano en Londres” de John Landies, por su parte, los vampiros nos deleitaron con “Fright night” de Tom Holland y “The lost boys” de Joel Schumaher a partir de los 90’s lo mas rescatable es la “Entrevista con el Vampiro” de Neil Jordan y de ahí para el fin de siglo no habrá mas, salvo pequeñas y valientes excepciones como “30 días de noche” basada en el comic de Steve Niles y los fieros y temibles licántropos de “Dog soldiers” de el ingles y muy competente Neil Marshal, también otros licántropos no tan fieros pero igual de inquietantes son los de la saga de “Ginger Snap”.

Para los que creían que no iba responder la pregunta que dio inicio a este articulo de tres partes, bueno esta breve y humilde historia del cine de horror es parte de esa respuesta y sencillamente el cine de horror es necesario para nosotros, no es tal vez como algunos dirán, necesario como las montañas rusas o los deportes extremos en donde se pone a prueba nuestras descargas de adrenalina que nos generan un turbio y extraño placer, o que nos dan la oportunidad de enfrentar nuestros miedos de una manera segura y confortable, tal vez estos argumentos sean parte de la ecuación del por qué nos gusta el cine de horror pero el más fuerte es que al igual que los demás géneros cinematográficos, la literatura o la televisión es parte de nuestra historia, claro una historia de nuestro lado oscuro, de nuestra peor faceta como seres humanos, de lo que no nos agrada como especie, nuestros miedos e incertidumbres, acerca de la muerte, el futuro y lo divino, de nuestros actos irracionales, de nuestra violencia como especie, del racismo de nuestra intolerancia, todo esto es parte de la historia que nos constituye y el que lo niegue en verdad no conoce que es la historia, nos vemos hasta al próximo articulo y vean cine.

jueves, 9 de septiembre de 2010

Psic. Victor Manuel Hurtado

“La música contemporánea”

Si alguien se ha detenido verdaderamente un momento a escuchar todos los sonidos que hay alrededor, seguramente se habrán preguntado si eso es verdaderamente música, aunque como en todos los casos, los excesos son siempre un problema, y en un mundo tan ajetreado y veloz como en el que vivimos actualmente podemos a llegar a perder el verdadero significado de música, así como su apreciación.

Algo que parecía imposible hace algún par de años, en estos momentos ha llegado a ser cotidianidad, por ello en algunos momentos perdemos de vista que la música es una de las Bellas Artes, y de las expresiones más sublimes que tiene el ser humano para poder expresarse. Desde la estructura de la melodía hasta la forma lírica en la que se estructura, la música es y será una de las más bellas expresiones que tiene el ser humano.

Pero en la actualidad, la música es una parte indivisible del ser humano, desde la descarga en un par de minutos de la canción de moda por la red, hasta el poder portar centenares de canciones en celulares, pero cabe la duda si toda este centenar de canciones verdaderamente son apreciadas en verdad (¿En verdad escuchan 300 canciones de un jalón?) o comúnmente nos dejamos llevar por la moda.

¿Por qué atreverme a usar la palabra moda con la música?, simple, existen y han existido tantos compositores e “iconos” musicales que se les denomina “Grupos Musicales Desechables”, que no son otra cosa más que aquellos que dentro de su repertorio musical, solamente 1 o a lo mucho 2 han sido sus éxitos, nadie recuerda el nombre de quien la cantó o quien la compuso, pero se queda grabada, y en cierto momento llega a ser un éxito, ya sea por tener un novedoso ritmo o por el lugar donde se aplica su característica melódica (un ejemplo en las fiestas), o simplemente tienen un tiempo de vida no mayor a un par de meses o algunos años, sea cual sea el motivo, estas agrupaciones musicales no llegan a trascender como otros verdaderos iconos musicales.

Otra de la manera en que vemos que la música actual es escuchada, es gracias a los escándalos que subyacen junto a los interpretes, no ventilare a algún “Músico” pero estoy seguro que al menos a la mente llego alguno, estos interpretes basan su carrera musical (si se le puede llamar así) gracias a escándalos en su vida personal.

Por desgracia el mayor aliciente para la mayoría de los compositores, no es que su música guste o sea un icono, sino que simplemente se venda (acaso no pensamos que el compositor también tiene que comer)

Y probablemente la existencia de todo este tipo de compositores y pseudo-interpretes sea gracias a nosotros, que no exigimos una mejor música, que no les exigimos que compongan algo nuevo, más sin en cambio, con una estructura lírica básica o inexistente, nos sentimos complacidos

Si la música es una expresión bella, capaz de atraer los sentidos y exacerbar el sentimiento de lo sublime, no es mejor exigir una melodía que llene estos requisitos, en vez de conformarnos con los que actualmente varios (no todos) los músicos hacen.

Diego Rogelio Tomasini

“Tan malvadamente bondadosa”
Reseña del libro: “Wicked : Memorias de una bruja mala”

Recientemente terminé de leer una novela bastante satisfactoria, con una calidad enteramente reflexiva la cual aborda un tema que se nos es inculcado desde la infancia al cual podemos citar como “Valores”.

“Wicked : Memorias de una bruja mala” Es una novela escrita por Gregory Maguire, el cual nos lleva a la ya conocida mágica tierra de Oz con un delicioso léxico narrativo que nos termina por envolver en su fantasía.

Lo curioso es que esta novela no inicia la historia con la llegada de la famosa Dorothy Gale; sino que retrocede en el tiempo al nacimiento de aquella mujer verde que despreciaba con un odio hirviente a la campesina desafortunada, y a la cual es cruelmente etiquetada como la malvada bruja del oeste (The wicked witch of the west).

Nadie jamás se puso a pensar en que este personaje también tuvo infancia y por tanto padres. Entonces... ¿Qué la empujó a la maldad?

Primeramente ¿Qué es la maldad? O ¿Hasta que punto es considerada a una persona mala?

Este personaje es llamado malo, pero ¿Cuál era su nombre? Nunca se hizo referencia a ella más que como bruja. Bien, pues esta chica se llama Elphaba y ella fue estudiante de la prestigiosa universidad de Shiz en la tierra de Oz.

Por convicción amante de la naturaleza y defensora de el conocimiento, Elphaba conoce a un grupo de amigos en el colegio y se da cuenta que no todo es tan bello fuera de el seno materno. Algo anda mal en Oz. Y ella lo sabe.

Otro de los temas que toca la historia es la tan cobardemente criticada política y la alabada fe en la religión. Confiamos tanto en un poder superior, que nos encomendamos a manos mas poderosas que las nuestras, las cuales creemos nos van a solucionar nuestros problemas aunque hagan cosas que no sea de nuestro parecer. Luego viene la inconformidad y por miedo muchos callan. Y ¿Que pasa con los que dicen “No me parece”?. Aquellos valientes que desafían la autoridad por su opinión o circunstancia son llamados de distinta manera: Revolucionarios, traidores o locos; dependiendo quien te ponga el nombre. Elphaba se atreve a decir “no” a los injustos y los desafía con un: ¿Por qué?

¿Acaso lo que buscaban era que callara una manera distinta de pensar? El sistema es criticado y amenazado en la tierra de Oz por una nueva presencia.

Como bien sabemos, aprendemos cosas en nuestras escuelas; pero la vida nos espera allá afuera, donde distintos encuentros y experiencias nos hacen formarnos como personas y crearnos nuestro propio punto de vista.

Y hay que afrontarlo: A veces cuando se nos es atacado con crueldad, la reacción más común es ser cruel con los crueles. Elphaba es una niña terca pero fija en sus principios, lo cual la convierte en una dura rival para su némesis: El maravilloso mago de Oz, creando un desarrollo de novela de una manera tan dinámica y emocionante así como frustrante.

Esta historia sin duda alguna nos permite ver un ángulo diferente, y ver con los ojos del antagonista, conociendo las intenciones de sus acciones y sus emociones mas profundas. Por que como nos daremos cuenta, “Bruja” es un calificativo para un ser humano, el cual también es emocional y como la misma palabra lo dice “Humano”.

Sin duda alguna, este libro recomiendo y me doy el lujo de decir que es Malvadamente cierto y embrujadamente reflexivo.

jueves, 2 de septiembre de 2010

Psic. Ivan Pozos

El Cuento de Miedo Parte II


El cuento de Miedo es todo aquello que la sociedad esconde pero que a la vez anhela, y que por estar escondido o prohibido, se le teme, y es esa sensación de miedo la que el ser humano necesita sacar a flote, así como el amor y la pasión, el hombre necesita sentir miedo, y siempre lo necesitará expresar en la forma que su contexto le demande, o la necesidad, ya sea personal o cultural, lo que su entorno y su lector le exija.

Es por eso, que con el tiempo el cuento de miedo ha ido mutando dependiendo los contextos; del castillo Gótico con su doncella eternamente perseguida, acompañada por ecos de ultratumba, mazmorras y fantasmas esplendorosos a finales del siglo XVIII. Después, el ingles victoriano y capitalista ya no tendría ni el tiempo, ni el interés en leer una novela de 400 páginas; donde el ya conoce el final, pero, lo que sí quiere seguir sintiendo es “ese agradable estremecimiento”, así que se las ingenia para hacerlo y surge el cuento de miedo realista, totalmente burgués y Victoriano; durante el siglo XIX. Pero como nada es para siempre, -más que la sensación de Miedo-, el nuevo joven capitalista y materialista del siglo XX, lleno de rupturas de sistemas que nunca le terminaron por convencer, se da cuenta de que hay mundos más allá del nuestro, criaturas que aun no conocemos, y se da cuenta de su mínima presencia en este universo, su necesidad de plasmar esa sensación de miedo a la inmensidad, al vacio, a la nada; esto se transforma en el cuento de “Horror Cósmico”.

Pero y si los monstruos ya no convencen después de dos guerras mundiales, y nos damos cuenta que lo único que puede destruir a un ser humano, es otro ser humano; entonces, el monstruo ya no chupa sangre ni se convierte en criatura hibrida entre animal, cosa o reptil, ¿y si es tu propio vecino quién exige tu vida?

En este caso no se da el verdadero cuento de terror numinoso. El verdadero cuento de miedo es aquel que refleja los temores, angustias y terrores a lo desconocido, pues no es lo mismo que un ser humano o tu vecino tenga un arma afilada, a que se tenga en frente una criatura o forma desconocida, que no sabemos qué es, ni como enfrentarlo. El primero, por que pertenece a nuestros esquemas de realidad y el segundo, es algo que no conocemos, no sabemos si es real o no, tampoco si es de nuestro mundo o no pertenece a nuestro mundo como lo materializamos. Por eso el cuento de miedo siempre será representante de nuestra condición, maneras y formas de nuestra realidad, por que esconde todo aquello que no conocemos, conscientemente. “El Miedo, no esta en el Monstruo, esta en Nosotros”.

Felices Pesadillas...

Lic. Pedro Alejandro González

¿Por qué ir al cine a espantarse? Parte II


En 1912 el inmigrante alemán Carl Laemmle funda el primer estudio cinematográfico independiente del monopolio de Edison, Universal Pictures; a partir de la década de los 20’s universal empezaría con un racha de buenas películas, pero algo bizarras como el Jorobado de nuestra señora de Paris de Wallace Worsey en 1923, después, el Fantasma de la Ópera de Rupert Julian en 1925, el Hombre que Ríe de Paúl Leni en 1925, todas estas películas mudas forman el precedente de lo que vendría a hacer la época de oro de monstruos, ya que utilizan novelas clásicas para la base de sus guiones y se le da gran envergadura tanto a la apariencia de los villanos como de los escenarios macabros, aquí el maquillaje tiene una labor primordial y el encargado de este es el mítico “Hombre de los Mil Rostros” Lon Chaney” quien seria el propio protagonista del Jorobado de nuestra señora de Paris y el Fantasma de la Ópera, aplicándose justamente el maquillaje de su creación, Chaney se baso en fotografías de soldados lesionados terriblemente en la primera guerra mundial para su caracterización del Fantasma de la Ópera, estas películas atípicas para la época, generaron gran expectativa en el hijo de Carl Leammle y futuro heredero de los estudios , Carl Leammle Jr. Quien decidió, a pesar de la negativa de su padre, apostarle al cine de monstruos y es así como surge la primera película sonora de terror Drácula de Tod Brownig de 1931 trayendo para el papel estelar a un actor teatral húngaro que personifica al conde en Brodway, Bela Lugosi , el éxito de la primera llevo a que el estudio se embarcará en una carrera que duraría mas de 20 años en la elaboración, manufactura y producción de películas de monstruos en su mayoría sacados de las novelas góticas de siglo XVIII y de terror y misterio del siglo XIX , en 1932 universal trae al director de formación teatral inglesa James Whale para que filme su clásico definitivo, Frankenstein, después vendrían los Crímenes de la Calle Morgue de Robert Florey, basado ligeramente en le cuento de Poe y le seguirían una legión de criaturas como la Momia de Karl Freund , el Hombre Invisible de James Whale, el Hombre Lobo de George Waggner, debido al éxito en taquilla y a la buena aceptación del publico, a pesar de la reinante censura de la época (Frankenstein tubo que ser cortada en diez minutos de su tiraje final ya que mostraba escenas subidas de tono y en contra de los valores cristianos de la época según los censores de Hollywood), las películas y tenían una infinidad de secuelas, que fueron desgastando las historias de sus monstruos y haciéndolas más inverosímiles y risibles para la audiencia , la solución del estudio fue crear sus famosas películas “Cóctel” o “Ensaladas de Monstruos”, en donde uno o varios monstruos de sus sagas se conocían y peleaban entre si (algo así como Alíen versus Predator, o Freddy versus Jasón) después de ahí Universal perdió el rumbo (salvo por el monstruo de la laguna negra en los 50’s) haciendo películas con cada vez menor presupuesto con sus antañas estrellas ya envejecidas y cayendo en el humorismo fácil y ridículo como con Abbot y Costello, Costello conocen a Frankenstein, de 1943 (algo así como aquí en México “Chabelo y Pepito contra los monstruos”) seria hasta mediados de los 70’s que una productora inglesa fundada por Will Hinds y Enrique Carreras “La Hammer” quien rescataría a los monstruos de su olvido, dotando a las películas de mas violencia y sexo, claro ya que la censura esta por dejar de ser un problema, además la gente era lo que buscaba, porque se da el inicio del movimiento juvenil del Rock and Roll, esta apunto de empezar la guerra de Vietnam, y la liberación sexual femenina por medio de la invención de la píldora anticonceptiva, los monstruos góticos en blanco y negro dejaban ya de asustar.

Lo que le paso a Universal Pictures con sus monstruos es algo común en el cine de horror según Norma Lazo en su libro “el horror en el cine y en la literatura”, el cine de horror atraviesa una serie de etapas convirtiéndolo en un genero cíclico:

•La búsqueda o alumbramiento
•La comercialización
•La parodia
•La deconstrucción

En la primera fase se obtiene una idea genial y se pone en marcha (adaptar Drácula al cine por ejemplo), en la segunda se explota la idea al máximo ya que tubo éxito (el sin fin de secuelas del Drácula de la Universal), en la tercera se agota el personaje o idea central y deja de tener un sentido y cae en la parodia (las comedia de Abbott y Costello) y el ultimo genero le devuelve su estatus de películas de horror partiendo de la autocrítica con algo de sátira sin caer en la absurda comedia (un ejemplo que me viene a la mente es la película de Scream de Wes Craven en 1996 que parodiaba los cliches del cine de asesinos seriales de los 80’s pero a la vez era una muy buena película de asesinos en serie, “la ficción dentro de la ficción”); a lo largo de la historia del cine de horror en el siglo XX veremos que esta evolución cíclica se dará y será detonada por los cambios sociales de cada década, por ejemplo durante los cincuentas predominaba esta ciencia ficción terrorífica en donde monstruos mutantes de fallidas pruebas nucleares (Godzilla en Japón), o invasores alienigenos con planes de conquista mundial (la genial los invasores de ultracuerpos de Don Siegel), el clima de incertidumbre después de los bombazos de Hiroshima y Nagasaki más el lanzamiento del primer satélite en orbita el Sputnik, nos pueden dar un indicador del origen de estas películas, pero no es sino hasta 1968 que un cineasta miope de Pittsburg Estado Unidos, daría al mundo del horror en celuloide una cinta que generaría el cine de horror moderno tal y como lo conocemos y es que la noche de los muertos vivientes de George A. Romero no solo es la generadora de un monstruo muy en boga actualmente, el zombie virulento y caníbal (que refleja una cantidad de miedos angustiantes de la modernidad, la perdida de la individualidad, el consumismo desenfrenado, el miedo biológico a las infecciones, etc.), si no que también es la madre de las películas de horror actuales mas violentas, mostrando “Gore” (significa sangre y son aquellas películas en donde los desmembramientos, y asesinatos se dan en lujo de detalle) con héroes atípicos para su entorno (en la noche de los muertos vivientes es un negro cosa imperdonable para esa época racista) el final no es el típico final feliz esperanzador donde matan al monstruo aquí todos mueren, pero sobre todo lo importante de la noche de los muertos vivientes es que partir de aquí ciertas películas tendrán una carga de denuncia social sobre los acontecimientos mas bárbaros y crueles de sus sociedades utilizando el horror como medio audiovisual y metáfora para mostrar al publico lo que otro tipo de cine no puede y es partir de los 70’s que una serie de directores influirán en el cine de horror mostrando los miedos y congojas de una sociedad cada vez mas autodestructiva después de Romero, vendría Tobe Hooper en 1979 con su Masacre de Texas, mostrándonos como los gringos y las sociedades contemporáneas comparten un miedo enfermizo al otro pero ya no al otro con características monstruosas evidentes como los monstruos de la Universal si no el otro cercano pero alejado por su realidad social la pobreza y el analfabetismo en esta película vemos que el malo, el asesino es el habitante de la comunidad rural alejada, la América profunda, conjuntamente psicosis, y las colinas tienen ojos de Wes Craven apuntarían también esta inquietud hacia los marginados y también generarían un nuevo monstruo, el humano común y corriente sin ninguna deformidad física o sobrenatural, pero con una gran perversidad moral, el asesino en serie, este monstruo que forjaría una sobreexplotación en los ochentas que llevaría a estas películas a ser clasificadas en el subgénero de “Slashers Movies”, bueno pero del el cine de los 80’s y el cine actual hablaremos en la tercera parte y ultima (espero) de esta breve conceptualización del cine de horror. Hasta la próxima peli.

Continúa a la siguiente semana...